La gente olvida diariamente la importancia de una sonrisa, algo tan simbólico, un gesto que si viene del corazón puede iluminarle el día a una persona, tan simple y sin ningún costo.
Leí en algún lugar ; "Las sonrisas se contagian como la gripe. Cuando alguien me sonríe, yo sonrío. Otra persona me ve sonreír, y a su vez, sonríe" Sonreír es una bonita manera de beneficiar a los que nos rodean y beneficiarnos a nosotros mismo. Y ese es el punto de inicio de mi historia.
Recuerdo que en medio de la monotonía de las redes sociales, una sonrisa llamo mi atención , hace ya bastante tiempo, era la de ella, en su nombre la penitencia, Barbara y en su apellido la frescura Islas.
Ese dia me interese en ver quien era, me interese en su trabajo, todo por una sonrisa.
Obviamente su belleza física fue lo que salto a simple vista, pero algo mas interesante fue lo que me tope al seguir sus redes sociales , su calidez de ser humano , su cercanía , su sentido del humor y su carisma..
Me anime a interactuar,, enviarle algunos mensajes, y me confirme que realmente era una persona bastante noble, y con una luz especial.
Es impresionante como alguien a pesar de ser una figura publica, de tener muchos seguidores que le escriben todos los días, y de ser muy bonita, mantiene los pies firmes en la tierra , no deja que este medio tan difícil la envuelva en falsas ilusiones .
Me encontraba el año pasado por México, y pensé que seria interesante aunque algo atrevido , quizás imposible, pero quería conocerla, quería darle las gracias, quería ver esa sonrisa en frente mio y me aventure. Le escribí un mensaje que se pudo ir en el mar de mensajes que recibe diariamente, pudo pasar desapercibido , o ser ignorado,no había ninguna certeza.
Pero lo leyó y aunque la primera vez no lo logramos, hubo un sorpresivo segundo intento. Me cito a fuera de Telehit, 7,15 pm, esa era la hora, yo me aliste y corrí al lugar que afortunadamente estaba cerca. Ahora que escribo esto analizo , el peligro que Barbara corría al aceptar verse con un extraño a esas horas, yo soy una personal normal , pero hay muchos locos en las redes sociales.
La vi, fue mágico, sentí bonito, es de esas personas que irradia energía, que la ves y te pones de buenas. Mis ganas de abrazarla eran muy fuerte , pero me contuve, quizás eso seria raro o invasivo, al cabo que ni nos conocíamos en persona.
No solo nos tomamos unas fotos, como es lo normal, si no que conversamos, si conversamos con la naturalidad de dos personas que pertenecen a un mismo nivel, como dos iguales que se acaban de conocer, le ayude a llevar su maleta al uber y nos despedimos. Fueron 10 o 15 minutos, quizás menos, pero me quedaron grabados en la memoria.
Hoy veía como algunas personas le reclamaban el no contestar un mensaje , y yo pensaba, realmente hay personas que se dan atribuciones y se crean historias en la mente solo porque una persona es muy atenta. Los artistas son seres humanos, que tienen muchas obligaciones, que reciben miles de mensajes en redes sociales, diario, a toda hora y de todo tipo. Conozco algunos que en persona son muy agradables pero nunca se toman el tiempo de contestar un tweet, o no quieren o no les gustan las redes.
Nadie tiene la obligación de escribirnos , ni de contestarnos, ni de querernos, menos alguien que no nos conoce, y menos una figura publica, a veces la gente se mal acostumbra por la cercanía que nos dan las redes. Barbara en efecto siempre ha sido muy afectuosa y muy cercana con sus seguidores, pero lo hace por que le nace y no se vale que la exijan , le reclamen o la asfixien algunos.
Yo recibí un día una sonrisa y eso me basta.
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